El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, señaló que apoya por completo a Israel en su derecho a defenderse. “No hay país sobre la Tierra que toleraría que cayeran misiles sobre sus ciudadanos desde fuera de sus fronteras”, dijo.

El mandatario, sin embargo, afirmó que sería “preferible” evitar que el Estado judío inicie una ofensiva terrestre en la Franja de Gaza.

El mandatario demócrata afirmó que persuadir a Israel de no iniciar una invasión dependería del éxito en los esfuerzos de los líderes de Medio Oriente para detener los ataques con cohetes del grupo palestino Hamas hacia el Estado judío.

Consultado sobre si creía que una ofensiva terrestre sería una escalada en el conflicto y si apoyaría esa medida, Obama dijo que ha mantenido contactos regulares con los líderes de Turquía y Egipto para buscar una manera de detener los ataques de militantes palestinos, que según sostuvo “precipitaron los eventos”.