El escalofriante Thiago Henrique Gomes da Rocha es uno de los criminales que más ha conmocionado Brasil, no solo por la frialdad con la que asesinaba, sino por la cantidad de asesinatos que cometió: 39 personas desde el 2011.

Brasil, país donde la violencia de las favelas es caso común no pudo dejar escapar el estupor de encontrarse con un nuevo tipo de delincuente: el asesino en serie.

Para detener a Thiago se necesitó de 120 policías en diversas zonas de Goiás, en el centro del país. Su abogado argumentó, en un principio, que su defendido fue intimidado por los agentes del orden para confesar los crímenes, pero luego, un examen balístico comprobó su culpabilidad. “Es enfermo mental” y “tiene que ser tratado”, sostuvo el letrado.

El comisario Alexandre Bruno Barros no cree en la inocencia ni locura de este asesino en serie, sobre todo con las pruebas recabadas. “no hay dudas de que él mató a los 39”. Y agregó que intentan determinar si fue responsable de otros dos homicidios que él niega. Sin embargo, aún no logran establecer si existí vínculo alguno entre las víctimas.

“Comenzó matando a homosexuales, después pasó a indigentes y por último a mujeres”, dijo el comisionado Barros. La mayoría de ellas tenía pelo largo y eran jóvenes: entre 13 y 29 años. Pero sus rasgos físicos variaban y todo indica que eran elegidas al azar.

“Lo que nos dijo es que salía a la calle con voluntad de matar: no importaba si era mujer u hombre”, señaló Barros. “Dice que sentía rabia. Mucha rabia. Y que para que pudiera pasarle esa rabia tenía que matar. En seguida sentía angustia y arrepentimiento. Y volvía a matar”, añadió. Thiago Henrique Gomes da Rocha sigue en custodia de la policía, quienes intentan entender su modus operandi.

Fuente: El Diario.