Alton Coleman (1955 – 200) fue un sociópata afroamericano que se convirtió en uno de los asesinos seriales más buscados de la década de los ochenta en los Estados Unidos. En menos de tres meses se ganó un puesto especial en la lista de los 10 más buscados del FBI.

A partir de 1973, cuando Coleman era un joven de 19 años, se despertó su gran apetito sexual: fue acusado con seis cargos de crímenes sexuales, entre cuyas víctimas estaba una de sus sobrinas. Sorprendentemente Alton logró convencer a las cortes que habían atrapado al hombre equivocado, por lo que fue puesto en libertad y continuó con sus actividades delictivas.

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Un año después fue encarcelado por robo y en la cárcel se le diagnóstico como ‘pansexual’, lo cual indicaba que Coleman necesitaba tener sexo constantemente sin importar la edad o el género de las personas.

De 1976 Coleman continuó siendo acusado de agresiones sexuales y en 1980 violó a una joven amenazándola con un cuchillo. En 1983 conoció a Debra Denise Brown, quien debido a un golpe en la cabeza, presentaba deficiencias mentales. Con ella entabló una extraña relación. En 1984 comenzó una cadena de violaciones, asesinatos y robos. Debra estuvo ahí para apoyarlo.

El 20 de julio de 1984, tras una larga lista de crímenes en distintos lugares, fue detenido junto a su novia. Coleman y Brown fueron a juicio desde mayo de 1985 hasta abril de 2002, momento en el que la pareja se quedó sin apelaciones y argumentos para evitar la pena de muerte. El 26 de abril fue ejecutado, sin embargo, la condena de Debra fue revocada y está prensa en una correccional de mujeres.

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