1. Datos bancarios por adelantado. Si una compañía te pide demasiados datos bancarios antes de ofrecer resultados, no le hagas caso, lo único que quieren es aprovecharse de tu cuenta.

2. Tus funciones no son las acordadas. Si te das cuenta de que, durante los primeros días, haces cosas que no habías acordado, entonces es el momento de huir.

3. El salario es demasiado alto. Si te ofrecen una cantidad exorbitante, seguro que no es verdad.

4. Ofrecen demasiadas facilidades. Si puedes elegir tu propio horario, administrar tus tareas y tomar decisiones sobre tu puesto, es solo para llamar tu atención pero no significa que sea una realidad.

5. Utilizan un vocabulario comercial. Te va a parecer que más que ofrecerte un trabajo, estarás ante un anuncio publicitario y que lo que intentan es venderte un producto.

6. Garantizan el curso de formación. Muchas empresas intentan llamar la atención de sus futuras víctimas asegurando que, tras realizar su curso de formación, encontrarán un trabajo sin problemas.

7. No hay información sobre la empresa. Si la oferta que te ofrecen es real debe de aparecer en la compañía ofertante. Un negocio derecho tendrá un sitio de Internet donde te ofrecerá información propia.

Fuente: Dinero.univision.com

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