Tener una casa propia, sin duda, es símbolo de estabilidad financiera y ofrece cierta seguridad para enfrentar el futuro. Sin embargo, un debate más grande se ha planteado en torno a la posesión de una vivienda: ¿Son más felices quienes alquilan una vivienda o quienes compran una casa?

Aunque resulta difícil de medir, debido a otras variables que influyen en la felicidad, diversos estudios han logrado recopilar datos interesantes en torno al tema.

Un estudio de la Universidad de Pennsylvania en el 2005 indicó que las personas que alquilaban propiedades tenían una vida social más activa y pasaban más tiempo con amigos y vecinos. Mientras tanto, quienes poseían un techo propio manifestaban tener más sentimientos negativos hacia sus vecinos y familiares.

Otro estudio de la Universidad de Massachusetts encontró que las parejas casadas que eran dueños de casas discuten más que las parejas casadas que vivían en una vivienda bajo alquiler.

Pero no todo es malo para los propietarios de una vivienda. El estudio realizado por el Instituto de Investigaciones Sociales y Demográficas de Estados Unidos arrojó que el 85% de los nuevos dueños de casa mejoraron su autoestima después de la compra de una vivienda.

Fuente: Real Estate Msn