El éxito o el fracaso no están asegurados para ningún negocio. Si bien lo mejor es mantener la compañía en una buena situación financiera, siempre existe la posibilidad de estar cerca a la quiebra. Pero esta situación no es una declaratoria de muerte para tu negocio, sigue estos consejos y podrás superarla.

1. Analiza la situación

Es importante conocer cuáles son las razones que han conducido a este mal momento y definir qué decisiones se tomarán para corregir los problemas surgidos. En este momento podría ser conveniente contar con la ayuda de un profesional en el tema.

2. Recorta gastos superfluos

Identifica los gastos innecesarios y redúcelos, recuerda que la falta de recursos es uno de los primeros motivos por los que muchos negocios funcionan mal. Todo gasto que no genera ganancias y utilidades debe ser eliminado: compra innecesaria de artículos de oficina, publicidades sin resultados, alquileres de oficinas demasiado grandes, consumo de líneas telefónicas ilimitados, etc.

3. Diversifica el negocio

Puedes incrementar tus ingresos ofreciendo productos o servicios complementarios a tus clientes. Así, sin arriesgar demasiado, puedes garantizar una nueva fuente de ingresos.

4. Evalúa el recorte de personal

Esta es una de las medidas más drásticas, pero en muchos casos será la principal. Elabora un estudio en el que selecciones al personal que resulta indispensable para tu empresa y establece requisitos fundamentales. Quien no cumpla con lo señalado en la lista, deberá irse.

5. Identifica las fugas de dinero

Siempre existen procesos dentro de las empresas que pueden darnos una serie de ingratas sorpresas: alteraciones de los precios, malversaciones de los fondos o, incluso, trabajadores aprovechados. Revisa si alguna de estas situaciones se está presentando en tu negocio y corrígelo tan pronto como te sea posible.

Fuente: Plusempresarial.com