Según AFP, la reducción es considerable teniendo en cuenta que ese monto (1,2 millones de dólares) se reparte normalmente entre dos o tres premiados.

“El recorte no afecta al significado del premio”, sostuvo Anders Bárány, exsecretario del jurado del Nobel de Física y quien mejor conoce los más de cien años de historia del galardón.

La mayoría de premiados tienen ya una edad avanzada o están ya “bien establecidos”, añadió. “No necesitan el dinero y lo utilizan para comprarse un bonito barco de vela o una casita para sus hijos”, precisó.

A los Nobel les ha salido competencia: a finales de julio nueve físicos se convirtieron en millonarios cuando recibieron en Nueva York el nuevo Fundamental Physics Prize: patrocinado por el ruso Yuri Milner, que supuso 2,4 millones de euros de premios.

También ha surgido el Premio Templeton, que galardona las contribuciones al entendimiento de la dimensión espiritual de la vida y que incluso tiene una mayor dotación económica que el Nobel.