En ese sentido, explicó que la PEA del país también está conformada por trabajadores independientes no calificados y no remunerados, lo que representa una situación riesgos a para la sostenibilidad económica.

“Al ver el PBI tradicional, el Perú se convierte en uno de los otorongos del mundo, un ejemplo extraordinario de dinámica económica, pero estamos reproduciendo una estructura laboral de subdesarrollo”, sostuvo.

Para Amat y León, uno de los desafíos para reducir el desorden que ha generado el ‘huayco social’ en la capital está en construir una agroindustria fuera de Lima, donde la organización de los centros poblados cuenten con tambos de servicio empresarial tecnológico que permitan incrementar la productividad.