El bajo sueldo y las exigencias de las empresas para cumplir metas sin retribuir el esfuerzo emocional de sus colaboradores impacta negativamente en la calidad de vida y salud de los empleados, generando estrés laboral y, por consiguiente, la productividad y el descontento general “enferma” a las compañías.

Sin embargo, un “buen sueldo” tampoco hace “empleados felices”. Para Luis Huamán Linares, gerente comercial de GoIntegro Perú, debe haber una combinación de salarios justos con incentivos para que un colaborador se sienta a gusto con su trabajo y aporte a generar un buen ambiente laboral.

“Las organizaciones deben entender que los trabajadores son personas con preocupaciones sobre su familia, su salud, su futuro profesional o su realización personal. Por eso, cuando se ponen en práctica programas de reconocimientos que amortiguan estas preocupaciones, los empleadores pueden observar resultados de su inversión, tales como mejoras en el clima laboral, en la actitud y compromiso de su personal”, expresó.

Huamán Linares indicó que si bien el tema de los bajos sueldos preocupa a los trabajadores, este puede compensarse con un esquema de beneficios que los empleadores puedan proporcionarles.

“La decisión de dejar o permanecer en un puesto de trabajo ya no gira, solamente, en torno al ofrecimiento de una jugosa remuneración. Los talentos, hoy en día, sopesan mucho los incentivos y reconocimientos que les pueda ofrecer”, precisó.

Actualmente, en el país, las empresas están apostando por mejorar su clima laboral implementando un sistema de recompensas dirigida a sus colaboradores.

“Muchas organizaciones optan por las bonificaciones especiales para sopesar la percepción de bajos sueldos. Otras prefieren brindar servicios a sus empleados, como la de instalar un comedor en la empresa y brindarles almuerzos sin costo o de proporcionarles transporte hacia el lugar de trabajo”, comentó el representante de GoIntegro Perú.

Descuentos especiales por servicios médicos para el trabajador y su familia; la provisión de útiles escolares; así como el otorgamiento o pago de cursos o seminarios de capacitación o especialización, son otros de los beneficios que pueden ofrecer las compañías.

“En el caso de las madres trabajadoras, las empresas pueden otorgarles un programa de beneficios flexibles que les permita realizar trabajos en casa o disponer de mayor tiempo para compartir con su familia”, sugirió Huamán.