Una corte estadounidense ordenó al gigante minero Grupo México (GM) devolver a su subsidiaria peruana Southern Copper un total de US$1,263 millones porque pagó en exceso por la compra de otra empresa de la firma mexicana.
En el año 2004, GM le propuso a Southern que adquiriera la Minera México. La compra se completó en 2005 por US$3,750 millones pagados con acciones de la compañía local.
Sin embargo, los accionistas de Southern reclamaron y un juez de Delaware resolvió que el pago por Minera México había sido demasiado alto. La corte determinó que la operación valía US$2,430 millones y ordenó a Grupo México devolver el pago en exceso.
En tanto, el Grupo México anunció que apelará el mandato “ya que dicha resolución no se apega a la ley de Delaware ni a la evidencia presentada durante el juicio”.