Los principales obstáculos que pueden ponerse las mismas empresas son:

1. Las empresas nacen locales: Las pymes nacen con una visión de vender sólo en su localidad, en un mercado pequeño y con pocas miras al crecimiento internacional. Una realidad diferente se vive en Estados Unidos, donde las empresas nacen pensando en clientes a nivel global.

2. Desconocimiento: Si una pyme no conoce a fondo su mercado nacional, es muy poco probable que conozca el mercado global. No basta con saber que tienes una idea o producto excelente, sino que debes estar seguro que cuentas con la calidad necesaria para satisfacer un nuevo mercado, y que has preparado una oferta competitiva lista para luchar con las empresas que jugarán de locales. No pierdas el tiempo viajando a otro país si aún no has realizado un buen estudio de mercado.

3. Apostar demasiado a los productos bandera: Los productos que tienen éxito en el país de origen no tienen garantizado el éxito en todos los mercados internacionales. Productos como el pisco o el camu camu, tienen éxito en nuestro país y en varios destinos internacionales, pero no en todos recibirán el mismo tipo de aceptación. Por eso es importante hacer un estudio de mercado que permita conocer un poco más la cultura del país que nos interesa.

Superadas estas barreras, no puedes olvidar que también es necesario tener conocimientos en cuatro áreas clave que te permitirán exportar de manera exitosa:

1. Búsqueda de proveedores: Se recomienda acudir a cámaras de comercio, catálogos y bases de datos.

2. Verificación de empresas: Si habrá una asociación con un proveedor o un distribuidor se deberá comprobar que cuenta con los documentos que avalen su operación forma legal.

3. Inspección: Tus productos deben contar con estándares de calidad acordes a las regulaciones vigentes en el mercado destino.

4. Trading: Conseguir una empresa que ayude en la tarea de negociación de precio y entrega de productos puede facilitar la tarea al momento de exportar.

Fuente: Plusempresarial.com

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