Perú es el sexto país con las reservas de gas natural más grandes en Latinoamérica, lo que se estima resultará como una enorme ventaja para su economía. Con la idea de aprovechar este recurso al máximo, se ha comenzado una iniciativa bastante innovadora: convertir los autos del país a gas natural. La idea es que algunas pequeñas modificaciones a los vehículos traigan consigo grandes beneficios, tanto ambientales como económicos, a corto y largo plazo.
Una estrategia innovadora
El suministro de energía primaria de Perú está dominado, en su mayoría, por los combustibles fósiles: gas natural, carbón y petróleo. Según EnerTek Global, consultora internacional de ingeniería y estudios de energía, el gas natural ha experimentado un crecimiento exponencial desde el año 2000, y uno de sus principales usos, además del residencial, es el transporte. Por lo tanto, las estrategias gubernamentales consideran que migrar los vehículos en Perú a gas natural representa una oportunidad de reducir su dependencia al petróleo y diversificar su energía.
Trasladar el gas natural a la mayor parte de la población significaría que disfruten de un combustible económico y amigable con el medioambiente. Igualmente, el aumento del uso de esta energía permite tener una tasa más alta de crecimiento y una economía estable en Perú. Lo que ha afectado positivamente el precio de las materias primas en el país, permitiendo a las empresas extranjeras ver un escenario optimista para invertir en Perú. Para el futuro, se estima que la demanda de gas continúe creciendo de forma gradual, y de esta forma ahorrarle al país millones de dólares en gastos de energía, lo cual impactará directa y positivamente en su PIB.
Programa y beneficios
La masificación del gas natural como combustible trae consigo un gran beneficio ambiental. La composición química del gas natural lo hace significativamente menos contaminante para el aire, lo cual a su vez, repercutiría positivamente en la salud y calidad de vida de los peruanos. Para impulsar su uso, se creo el programa BonoGas Vehicular, el cual permite a los propietarios de autos, tanto particulares como públicos, tener acceso al gas natural vehicular. Sin realizar grandes cambios, los autos de gasolina pueden cambiar a gas, por lo que el programa cuenta con diferentes créditos de bajos intereses, y una taza de financiamiento para que los dueños puedan realizar estas modificaciones en los talleres autorizados. Además, todo el proceso de cambio tiene como duración máxima una semana.
Actualmente, las ciudades que cuentan con centros que distribuyen este combustible son: Lima, Callao, Ica, Lambayeque, Piura, La Libertad y Junín. Migrar al gas natural beneficiaría a los ciudadanos, al tener acceso a un combustible seguro y considerablemente más económico en comparación con la gasolina, sin mencionar que es mucho más sostenible para el medio ambiente, dando como resultado poblados más limpios y estables económicamente para los residentes de Perú.
Como resultado de una gestión energética más inteligente, Perú ahora ha comenzado a diversificar el uso de energía, reduciendo su dependencia en importaciones, y posicionándose como un exportador de gas natural. Igualmente, se convirtió en un pionero en Latinoamérica en masificar el uso del gas para tener un combustible más sostenible, lo cual lo deja como un referente positivo y ecológico frente a los otros países de la región y del mundo.