El gobierno de España, que encabeza Mariano Rajoy, aclaró que no aplicó ninguna represalia contra Argentina por la decisión de expropiar YPF a la compañía Repsol e insistió con el pedido de que se pague un precio justo por la virtual confiscación que se produjo de esa petrolera en Buenos Aires.

Según información publicada por diversos medios españoles, el encargado de plantear la posición oficial española fue el ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, uno de los más combativos funcionarios al momento del anuncio de la medida en Buenos Aires, quien se ocupó de aclarar la posición de Madrid en el conflicto.

Las declaraciones del funcionario coinciden también con trascendidos publicados en el diario ‘El País’, sobre una supuesta decisión de moderar el tono del conflicto bilateral.

“El Gobierno ya ha empezado a replegar velas, consciente de que los intereses económicos de España en Argentina no se limitan a Repsol y de que la relación estratégica entre ambos países sobrepasan los desacuerdos entre sus gobiernos”, indicó el rotativo.

También trascendieron nuevas declaraciones de Soria, el otro ministro que más alto había pronunciado las quejas contra la administración de Cristina Fernández de Kirchner.

“Preguntado por el caso YPF, el ministro ha insistido en que el Gobierno no ha adoptado ningún tipo de represalia, sino que ha suspendido los tratamientos de preferencia que España daba al país andino en determinadas importaciones como el biodiésel”, estableció en su edición el portal de noticias Europapress.

Asimismo, el diario ‘El Confidencial’ indicó que “Soria ha confiado en que se delimite el ’justiprecio’, y ha preferido no pronunciarse (sobre una posible venta de parte del paquete accionario a una compañía china) hasta que no se retribuya la expropiación”.

Fuente: La Nación de Argentina