Los empleadores ignoraron la paralización del gobierno registrada durante las discusiones parlamentarias, lo que sugiere que la crisis sobre el presupuesto tuvo un impacto sobre la economía más limitada de lo que se esperaba inicialmente.

Los últimos datos difundidos por el Departamento de Trabajo de Estados Unidos revelaron que los empleadores sumaron 204 mil nuevos empleos a sus nóminas el mes pasado. Sin embargo, la tasa de desempleo creció 7,3%.

El sector privado fue responsable de todos los empleos creados el mes pasado, mientras que las nóminas del gobierno perdieron 8 mil puestos de trabajo.

El Departamento de Comercio estimó en 2,8% el crecimiento del PIB, una cifra que, sin duda, ha sorprendido a los analistas. La estimación media de los economistas situaba el crecimiento en 1,9%.

En el segundo trimestre, el PIB de EE.UU había crecido 2,5% mientras que en el primero el aumento fue de 1,1%. La Casa Blanca celebró las cifras, aunque adelantó que en el cuarto trimestre el crecimiento podría bajar.

Fuente: Agencias