El bitcoin, moneda virtual y programa de transacción presente en el mundo financiero desde el 2009 y conocido como criptomoneda, ha sabido ganarse el interés de muchos empresarios y emprendedores quienes ven en este sistema una forma segura de proteger sus capitales e inversiones.

Pero, ¿cuáles son las ventajas económicas que las criptomonedas les ofrecen a ellos? En este sentido, Dennis Carranza, Country Manager de Buda Perú, empresa que desarrolla y opera mercados de criptomonedas en Perú, Chile, Colombia y Argentina, indica algunas de ellas:

Transacciones seguras

Uno de los principales beneficios de las criptomonedas es que permite realizar transacciones con total libertad, transparencia y seguridad debido a la encriptación de los datos ya que no depende de un ente central y tiene al Blockchain como base de datos inviolable.

Pagos inmediatos

Cuando se realiza una transferencia bancaria entre dos entidades distintas el usuario debe esperar entre uno y cinco días para recibir el dinero en su cuenta. Con bitcoin, sin embargo, los pagos se realizan de manera instantánea y el destinatario recibe los fondos en solo unos segundos.

Conveniencia y justicia

En la actualidad las transferencias internacionales están sujetas a unas comisiones fijas y variables relativamente que no todos los usuarios pueden afrontar. De ahí que otro de los beneficios de las criptomonedas resida en que realizar transacciones de criptomonedas cuesta mucho menos que en una entidad financiera tradicional.

En cualquier momento y lugar

Las transacciones con criptomonedas se pueden realizar en cualquier momento y lugar debido a que no están restringidas a los horarios de una entidad financiera.

Pagos más fáciles

La facilidad para hacer transacciones es otra de las ventajas de las monedas virtuales, que permiten realizar pagos escaneando un código QR que identifica al destinatario y estableciendo la cantidad que se desea enviar.

Además, podemos transferir dinero a cualquier parte del mundo con bajos costos sin intermediarios. Esto no solo beneficia a las empresas privadas, sino a las distintas administraciones estatales o a las organizaciones internacionales que trabajen en distintos países a la vez.