El pasado 10 de noviembre la provincia de Andahuaylas fue testigo de un desafortunado hecho tras el 9º día de paralización antiminera. Tras un enfrentamiento social, entre pobladores y policías, el hecho llevó a reportar 32 heridos entre civiles y policías. En horas de la tarde, una turba de manifestantes prendió fuego a las instalaciones de la gerencia subregional, a través del informe del jefe de la compañía general de Bomberos Eco.

El establecimiento habría visto consumir hasta un 60%. Se supo que habría aproximadamente 50 cartuchos de dinamita en el lugar, que por suerte no fueron alcanzados por el fuego.

Además, un medio de comunicación sufrió graves consecuencias por parte de manifestantes, quienes arremetieron cuando cumplían con informar lo sucedido desde la Gerencia Subregional Chanka.

*ELIO PORRAS MARTINEZ *