El distrito de Amarilis en Huánuco luce como si hubiera sido el escenario de una guerra. Las calles están amontonadas de tierra y con la lluvia se forman pequeñas lagunas que no dejan circular con normalidad a los peatones y vehículos.

Este hecho causa malestar a los vecinos y visitantes de otras ciudades, ya que se les hace una odisea salir de sus casas a sus centros de trabajo. Urge la atención del actual alcalde Ricardo Moreyra, al cual parece no interesarle el asunto.

Hace más de tres meses, se iniciaron los trabajos de cambio de tuberías de agua y desagüe y pavimentación de las pistas en el distrito de Amarilis, específicamente en el sector de Huayopampa y Llicua, pero la demora de estos trabajos hacen que las calles se encuentren cerradas al tránsito vehicular, causando malestar entre los vecinos.

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