Israel intenta combatir los desórdenes alimenticios que están provocando las campañas publicitarias en las que se muestran modelos superdelgadas.
Los anunciantes deberán ser muy rigurosos a la hora de elegir las modelos para su publicidad. Además esta deberá indicar si las imágenes han sido alteradas par “adelgazar” a las modelos.
Esta es la primera ocasión en que un Gobierno pone freno a la industria de la moda y su obsesión con un prototipo de mujer que fuerza a modelos a tomar drásticas medidas para no aumentar su peso.
Los defensores de este tipo de medidas consideran que con estas regulaciones se evitará el efecto en la salud que estas figuras causan entre jóvenes y adolescentes al tomarlas como referentes para su presencia física.