En el país de Sri Lanka, Asia, se encuentra una imponente estructura rocosa de 370 metros de altura. Una formación que adorna la llanura. Es el resultado de una erupción de magma endurecida y erosionada por miles de años, del volcán de Sigiriya, uno de los lugares más visitados del mundo.

En el siglo V a.C, la elevación fue usada como monasterio por dos siglos; y luego, elegida para dar lugar a un palacio real del rey Dhatusena. El diseño se asemejaba a una ciudad amurallada y ajardinada sobre la roca.

Para llegar a lo más alto, los turistas deben subir por 1230 escalones. Y el trayecto también es hermoso: restos de obras monumentales, estanques excavados en la roca, garras de un león talladas en el acceso. Todo hasta llegar al alto palacio monumental resguardado por una muralla natural de 200 metros de caída libre.

Fuente: traveler.es