La arquitectura y ubicación del Monte Saint Michel lo han posicionado como el tercer lugar más visitado de toda Francia, después de la Torre Eiffel y el Castillo de Versalles. Más de 3,5 millones de personas visitan este lugar todos los años; y ha sido declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.

El Monte Saint Michel es también un municipio francés, que se alza en una inmensa bahía que recoge las más grandes mareas de Europa. Posee una superficie de alrededor de 500 kilómetros cuadrados, y otorga mucha diversidad de fauna, flora y luminosidad.

Su nombre se lo debe a los cultos del arcángel San Miguel durante la Edad Media, cuyo nombre en latín de la época era “Mons Sancti Michaeli in Periculo Mari”. En lo alto figura una iglesia, con una estatua de San Miguel Arcángel colocada en la cumbre, a 170 metros de la orilla.

Fuente: france.fr/es