En Bolivia, se encuentra el sitio arqueológico conocido como el Fuerte de Samaipata, a una altura de 1950 metros sobre el nivel del mar y considerado la mayor obra de arquitectura rupestre del mundo.

En 1998, fue declarado Patrimonio Cultural de la Humanidad por la Unesco. Este sitio en realidad no es una fortaleza militar (antes se creía esto porque estaba ubicado en una colina, estratégicamente), sino un antiguo asentamiento religioso construido por la cultura Chané durante los siglos XIV a XVI.

La gran roca esculpida que domina el sitio arqueológico desde lo alto es una prueba, única en su género, de las tradiciones y creencias prehispánicas.

Debidamente guiados, los turistas pueden entrar al Fuerte de Samaipata y admirar esta obra, que significa en quechua “lugar de reposo entre las montañas”.