Sumergida desde 1954 al fondo de la bahía de San Fruttuoso, en Lugiria, una región de Italia, se encuentra la estatua de bronce de Jesús de Nazareth llamada “Cristo del Abismo”. Pocos viajeros la conocen y pocos se aventuran a observarla.

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El Cristo del Abismo está a unos 50 metros de profundidad, y fue esculpido por un artista de Italia para conmemorar la muerte del primer buzo italiano en dicha zona.

Fue tallado con los brazos hacia la superficie, representando la oración. Hoy en día la zona en donde se ubica es un parque marino protegido, y accesible al público en general que busque una aventura bajo el mar.

Los turistas que deseen conocerlo deben ir con el guía correcto, o tener una moderada experiencia como buzos. Además, claro está, de contar con el equipo necesario para sumergirse.

Se trata de una atracción turística para los que busquen algo fuera de lo común: una colosal estatua en el fondo del mar, abandonada a su suerte.

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