Está formado por ríos de cursos variables que descienden desde alturas considerables, quebradas profundas, elevadas montañas, caminos serpenteados y grandes mesetas.

Esta ciudad está circundada por campos y pastos. Antiguamente, estas tierras estuvieron habitadas por el imperio Huari, luego por los anccaras y los Chancas.

Finalmente, éstos últimos fueron conquistados por el Imperio Inca. Luego, los españoles descubrieron ricas minas de azogue (mercurio) y plata, razón por la cual se asentaron en el lugar. Testimonio del período colonial son sus casonas y magníficas iglesias coloniales.

El poblado de Santa Bárbara, ubicado en las afueras de la ciudad, destaca por su antiguo templo. También pueden visitarse asentamientos mineros que funcionan desde tiempos coloniales, así como Izcuchaca, centro alfarero ubicado a 78 kilómetros de Huancavelica, donde se encuentran aguas termales y sitios arqueológicos.