Qorikancha o recinto de oro, antiguo Templo del Sol en donde ahora está situado el Convento de Santo Domingo. Fue uno de los templos más importantes y venerados en la ciudad del Cusco, Perú. Allí, los ancestros rendían pleitesía al máximo dios inca: el Inti (dios Sol), por lo que solo se podía ingresas en ayunas, descalzos y cargando algo en la espalda.

En las ruinas del templo aún es posible apreciar la increíble arquitectura inca. Los muros tienen piedras más grandes que las que hay en Machu Picchu, y todas encajan milimétricamente. Se sabe que cada muro estaba cubierto de oro, y que fue robado por los antiguos españoles. Con tal adorno, solo hay que dejar volar la imaginación y ver cómo era realmente el interior de este templo de oro cuando se encontraba en todo su esplendor.

La entrada a este lugar cuesta 10 soles aproximadamente para los adultos. Cualquier turista puede aproximarse a este venerado templo y observar la historia y cultura de una antigua civilización peruana.

Fuente: qosqo.com