El imponente Castillo Unánue se ubica a orillas del río de Cañete, en el distrito de San Vicente, situado sobre una huaca artificial pre inca. Es uno de los símbolos turísticos de Cañete pese a la indiferencia de las autoridades en cuando a su cuidado, y a los constantes sismos que amenazan con su destrucción.

La edificación de este castillo se inició en 1843, y terminó en 1900. Habría costado unos mil pesos de oro, lo que hoy en día sería igual a un millón de dólares. Fue construido por José Unánue (hijo de Hipólito Unánue), quien quería la residencia más suntuosa de la costa peruana, en memoria y honor a su padre.

Los turistas pueden ver una edificación al estilo gótico; y al entrar, encontrarse con túneles y calabozos que existen bajo el castillo, los cuales se usaron como la primera cárcel de Cañete en 1924. Según la leyenda contada por los lugareños, el interior del castillo tiene tres túneles. Uno conecta con la Hacienda Montalbán a 3 km. El otro, con la Hacienda Arona a 5 km., y el tercero con la playa de Cochahuasí a 3 km.

Fuente: 3i.com.pe