Tolinchilove ya es un nombre recurrente en los grandes eventos que se realizan en la escena electrónica de nuestro país. Fiel a un estilo musical, ha sabido capturar una creciente legión de seguidores que encuentra en él a un alquimista del house: alguien que saca lo mejor de cada estilo housero, ya sea funky, clásico, soulful, old school. Oveja Negra se sentó a conversar con Tolinchilove para conocer sus impresiones sobre la música electrónica, la movida local, el oficio de Dj/productor y la internacionalización, entre otros temas.

ON: ¿Cómo es que llegas a la música electrónica? ¿Cómo elegiste tu alias?

T: Llegué a la música electrónica como consumidor de música y fiestas electrónicas hace ya 9 o 10 años. Mis amigos de la playa iban a los tonos desde mucho más chibolos y con el tiempo me animé a ir a uno. No recuerdo cuál fue el primero, pero tal vez uno con Timo Mass… y desde el primero me enganché.

En esa época el progressive house estaba en todos lados y mis favoritos eran Catta, Masyello, Sasha, Howells, 16Bit Lolitas (a quien tengo el gusto de tener como amigo personal, al igual que Ricky Ryan, quien es otro de mis favoritos), entre otros. Esa fue la época dorada del progre. Luego de 4 o 5 años de solo disfrutar ir a los tonos y bailar libre y feliz en cada fiesta (y aprender a reconocer los géneros y subgéneros), me empezaron a entrar las ganas de saber cómo mezclar y justo me había hecho amigo de Paul Trelles (quien es mi mejor amigo en el mundo de la música electrónica y uno de mis Djs favoritos en Perú). Él me enseñó a usar el Traktor (software de mezcla usado por varios Djs) y me pasó mis primeros tracks. Paul es un ídolo, siempre le agradezco que me haya ayudado desinteresadamente, pocos Djs hacen eso.

Mi alias nació tiempo antes de ser Dj… Kike Mayor (quien también se volvió amigo personal) siempre me decía que yo no era solo Tolinchi (mi apodo hasta el día de hoy), sino que yo era Tolinchi Love (era una joda relacionada a las flacas). Al comienzo era de joda, pero el concepto siempre me pareció de putamadre, así que cuando empecé a mezclar y buscaba un nombre pensé en Tolinchilove… Tolinchi por el nombre y Love por el mensaje. Quería transmitir amor a través del house que toco porque la música que más me gusta es bien amorosa, alegre, buena onda y divertida. Música para bailar y sonreír.

Quería aprovechar esta nota para aclarar que el house se escucha hace muchos años en el Perú, muchísimo antes de que yo siquiera escuche música electrónica. No me considero un pionero del género ni mucho menos, solo soy un Dj que disfruta de tocar funky house. Lo digo porque en una nota que salió en otro medio se dio a entender que dije eso y me causó algunos inconvenientes con otros Djs del medio, todo fue una confusión y quería aprovechar para aclarar eso, pido disculpas si se hirieron sensibilidades.

ON: ¿Cuál es la mística del “funky love” de Tolinchi?

T: Mística me parece una palabra increíble pero un poco sobredimensionada. Lo que puedo decir del concepto “Love” es que cuando toco, me siento como uno más del público. Y como bailar es lo que más amo hacer en la vida y lo que más libertad me da, cuando toco bailo con ellos, grito con ellos, aplaudo, salto, la gozo al máximo con la gente… supongo que allí podría estar la “mística” (si la quieres llamar así): ser uno más de los que está pasándola increíble en la fiesta. Creo que la gente se siente identificada con eso y por eso funciona bien.

ON: ¿Por qué el house es tu género favorito? ¿Qué puedes contarnos sobre la vertiente que cultivas: el funky house?

T: El house es mi género favorito por muchas razones: primero que todo, por sus raíces funk, soul disco, jazz y R&B y góspel, que son mis géneros favoritos en la música. Los loops y samples con esos sonidos me llenan el corazón, marcan una diferencia entre esa música electrónica y otras. Tuvieron que pasar varios años de escuchar muchos géneros y subgéneros para entender qué sonidos eran para mí y, dentro de ese género, cuál era la rama que más encajaba con mi personalidad y mi mensaje. Allí nació la idea de dedicarme al funky house, que de verdad siento que es el soundtrack de mi vida.

Además, el house es la rama más instrumental de la música electrónica y amo el house porque tiene instrumentos sonando sobre los beats, no me gusta el exceso de monotonía en la música electrónica. Siempre estuve influenciado por el french house noventero, especialmente por Saint Germain, Daft Punk y Cassius, entre otros.

ON: Has lanzado recientemente “Blade Dancer”, tu primer track; ¿cómo sentiste el salto del disckjockeo a la producción musical?

T: La verdad es que no siento que he dado un salto al mundo de la producción (faltan años para eso), ya que como muchos saben el track lo hice en colaboración con mi ‘broder’ Tony Villanueva (Tony V.), un talentoso productor peruano, quien es el que sabe realmente producir. Él me ha dado clases anteriormente y como no soy muy bueno ni con la teoría musical ni manejo a la perfección el Abbeton Live (programa usado para la elaboración de música electrónica), y no quería quedarme sin meter la mano en la producción musical, nos propusimos trabajar juntos de la siguiente manera: yo proponía ideas, creaba algunos loops de ritmos y algunos solos en los instrumentos midis, y él se encargaba del resto de la producción, la verdadera chamba: armar el track, poner plug-ins, meterle efectos, darle un sentido a las ideas y crear la mayor parte de los sonidos. Espero algún día llegar al nivel de hacer un track por mí mismo, pero por ahora lo veo lejos. Sin Tony, no existo como productor.

Con respecto a “Blade Dancer”, es un track al que le tengo mucho cariño porque nació de un loop de otro track al que le tengo feeling y sobre la base de ese loop armamos un groove divertido, alegre y que a mi parecer tiene ese sentimiento que me gusta llamar “Love” (que es lo más importante para mí en la música). En el proceso de creación del track a Tony se le ocurrió meterle los vocales del monólogo final de la película Blade Runner y quedaron de putamadre, ¡esa voz tiene actitud! Allí se me ocurrió el nombre del track.

“Blade Dancer” ya está a la venta en Beatport a través de Offsite Records, un sello peruano que se las trae con lanzamientos de artistas de peso como JUST2. Aprovecho de agradecerles por dejarnos incluir el track en su compilatorio “We are Offsite Vol. 03”.

ON: ¿Se puede vivir actualmente siendo solo Dj, sin producir? ¿Y viceversa? ¿Por qué?

T: Localmente creo que sí… aunque cada vez es menos probable. Ser Dj es tan fácil hoy en día (por los softwares de mezcla y la accesibilidad a la música) que la verdadera manera de diferenciarte es produciendo tus propios tracks y entrando a sellos de peso, quienes a su vez están relacionados con agencias de management mundiales y pueden ayudarte a conseguir giras a través del mundo. Localmente se puede ser Dj y tal vez vivir de esto (si logras una carrera sólida), pero para lograr internacionalizarse creo que son muy pocos los casos que pueden lograrlo sin producir. Yo soy un ejemplo de que se puede ser Dj de música electrónica en este país sin ser productor aún, pero si quisiera internacionalizarme creo que la producción sería un paso obligatorio.

Hace unos 10 años aproximadamente, había una mayor diferenciación entre los Djs y los productores. Me parecía mejor cuando había productores que sabían producir y se dedicaban exclusivamente a eso y Djs que sabían mezclar y se dedicaban exclusivamente a eso. Creo que se está forzando un poco el mercado al obligar a algunos Djs a producir y a algunos productores a mezclar… no todos son buenos haciendo ambas cosas. Yo, por ejemplo, me considero un buen Dj en vivo, pero un productor en pañales. No creo que sea necesario ser bueno en una cosa para ser bueno en la otra, se están confundiendo un poco las cosas. Una cosa es lo que generas tocando en vivo, en la fiesta, generar empatía con la gente y crear la energía del momento, sabiendo elegir la música para cada situación; y otra muy distinta es tener el talento y la musicalidad para crear una canción que pueda crear un impacto en la gente o en otros Djs que quieran tocarla.

ON: ¿Cuáles son, en tu opinión, las fortalezas y debilidades de la escena electrónica local? ¿Qué puedes decirnos sobre la escena en provincias?

T: La fortaleza más importante de la escena electrónica local, a mi parecer, es la gran comunidad que existe hace años y sigue en aumento, tanto en la escena underground como en la escena comercial. Es increíble que siendo un país tercermundista y una sociedad que aún es retrógrada en muchos sentidos, seamos potencia sudamericana en lo que se refiere a música electrónica (junto con Brasil y Argentina, somos la plaza más elegida por los Djs internacionales para venir a tocar en sus giras). Eso hace que nos alimentemos de mucha cultura electrónica y estemos actualizados con lo que sucede en el mundo.

Con respecto a las debilidades, creo que aún hay mucha informalidad en algunos productores de eventos y en algunos Djs también; asimismo, creo que la paga a los Djs de electrónica es un tema urgente que resolver. No puede ser que los Djs de pachanga ganen mucho más que nosotros por tocar los mismos edits de siempre de las mismas canciones de siempre, mientras que nosotros, que estamos en una constante búsqueda y evolución, recibamos tan poco por tanto trabajo. Ese es básicamente el mayor problema de la escena local (y tengo entendido que mundial también), los Djs amateurs tienen tantas ganas de ser conocidos (y a veces no por las razones correctas) que tocan gratis o por muy poco dinero y arruinan el mercado para los demás. Hace falta un gremio urgente, pero como esta carrera es tan individualista también lo veo difícil. Lamentablemente, no hay mucha unidad ni apoyo entre colegas, cada uno rema para su lado y eso hace más difícil el crecimiento de este arte como una profesión rentable.

La verdad es que desde que yo empecé a tocar nunca lo hice por la plata, pero es una consecuencia que llega por sí sola si haces las cosas bien y también es algo necesario porque dejas de trabajar en otras cosas para dedicarte exclusivamente a la música. Llegar a vivir de lo que amo es lo mejor que me pasó en la vida, día a día agradezco a la vida por eso, soy consciente que no todos pueden hacerlo.

Con respecto a la escena electrónica en provincias, puedo decir que hay ciudades más desarrolladas que otras, como Cusco, Arequipa, Trujillo… pero en general aún nos falta bastante para que en provincia haya la movida que hay en Lima.

(Foto: Daniel Rodríguez/Loop Promote Group)

ON: Tienes un nuevo proyecto musical colaborativo, Ninalove; ¿con quién lo compartes y qué propone?

T: Nina Love nació como las mejores cosas de la vida, espontáneamente. Mi amiga Karen Nina Recharte es cantante y ha estado involucrada en distintos proyectos musicales. Un día de verano toqué en Coa Bar del Dragón del Sur y al día siguiente tenía un mensaje en Facebook de Nina, quien me decía que había disfrutado mucho del set y que sería chévere juntarnos algún día a probar cosas. Le respondí enviándole unos tracks de prueba, ella me respondió con unas grabaciones improvisadas sobre las pistas que le mandé, y lo siguiente que hicimos fue una prueba de sonido antes de nuestra primera tocada, también en Coa.

El set que tocamos ese día fue 100% improvisado y salió lindo, de hecho tiene muchas cosas por mejorar pero la base está allí. Un house con pinceladas deep, una cadencia más musical y menos electrónica de lo que suelo tocar y con muchas melodías sobre las que Nina canta con el micrófono efectado desde la mixer. La idea es ensayar juntos y tener algo menos improvisado para la próxima presentación. El proyecto por ahora es solo un Dj set con voz en vivo, pero sería lindo a futuro producir cosas también. La voz de Nina tiene soul y magia y aparte es recontra sexy, es chévere tocar con ella. La idea es poder agrandar el espectro musical que puedo llegar a tener como Dj, no siempre tocar lo mismo, sino tener proyectos en paralelo como Nina Love que me den la satisfacción de hacer algo distinto dentro de lo infinita que es la música electrónica.

ON: Desde no hace mucho tiempo mantienes una residencia para una importante promotora del medio, ¿cómo va eso?

T: Sí. Desde el inicio de mi carrera fui Dj freelance. No hay muchos lugares ni muchas promotoras donde se pueda tener una residencia en Lima, hay que moverse por todos lados para poder vivir de esto. En 2012 mi ‘broder’ George Capristan hacía fiestas con su promotora Unity, él fue el primero en darme la oportunidad de hacer warm-ups en eventos con Djs de peso como Kaiseridsco, Sébastien Léger, Kabale und Liebe, entre otros. Siempre agradezco esas oportunidades que me dio, me sirvieron bastante para crecer como Dj y ser conocido por más gente.

Unity dejó de hacer fiestas hace unos años, así que seguí como freelance hasta mediados de año pasado, que empecé a trabajar con Loop como promotor de sus fiestas. Era una manera de estar más cerca de la promotora más importante del país y de paso entrar gratis a los tonos y pasarla bien entre amigos. Mi idea era a futuro poder tocar en alguna de sus fiestas y poder ser parte del team, pero no esperaba que fuera tan pronto. En diciembre del año pasado el Chino Ruiz me propuso ser parte del staff de Djs y de hecho ha sido lo mejor que me ha pasado en esta última etapa de mi carrera. Tener el apoyo de una promotora de ese calibre es lo mejor que le puede pasar a un Dj, estoy eternamente agradecido con el Chino y con Loop en general. Gracias a ellos ya toqué dos veces en el Blackroom de Joia y hace unas semanas en la fiesta más grande en la que toqué en mi vida (aparte del Life in Color), en el estadio Monumental junto a Skrillex, Kill the Noise Y Oblique – Live, para más de 5 mil personas. Una experiencia increíble y abrumadora.

ON: ¿Qué Djs han sido tu principal inspiración? ¿Cuáles son tus héroes modernos?

T: Recién desde los 19 años la música se volvió parte trascendental en mi vida. Gracias a influencias como The Beatles, Pink Floyd, Led Zeppelin, Jimi Hendrix, etc. Todo el rock clásico de los 60 y 70 fue mi puerta de entrada al maravilloso mundo de la música (antes de eso solo escuchaba música romántica como Alejandro Sanz, mis amigos siempre me joden con eso jajaja).

Luego del rock vino el funk, disco, soul y toda esa corriente musical que amo con todo mi ser y es a la que me dedico. James Brown, George Clinton, Jamiroquai, Los Amigos Invisibles, entre otros, fueron el prólogo antes de conocer el house noventero de Daft Punk, Saint Germain, Cassius y toda esa onda que vendrían a ser mis raíces en la música electrónica.

Como Djs admiro bastante a los que considero unificadores; es decir, Djs que muchas personas que gustan de distintos géneros pueden disfrutar en una fiesta. El caso de Djs como Carl Cox, Joris Voorn & Fanciulli y Luciano son buenos ejemplos de eso. Cuando voy a una fiesta no busco degustar los sonidos o sobreanalizarlos, busco pasarla bien y bailar como si no hubiera mañana junto al resto de la gente; ellos son los maestros de eso, así que ese es el perfil de Dj que busco ser.

Y musicalmente hablando, los Djs que más que me gustan y a quienes respeto y quiero bastante son Greg Wilson, Dimitri from Paris, Phil Weeks (a quien tuve el grandísimo honor de cederle la cabina en su fiesta en Lima), Mark Farina, Todd Terry, Doc Martin, Justin Martin, entre otros. Y los sellos que más sigo son Robsoul, Defected, Guesthouse, We Play House y muchos más en esa corriente.

(Foto: Daniel Rodríguez/Loop Promote Group)

ON: Eres conocido por fiestear con ganas mientras tocas, ¿consideras que hay que ser un raver para entender bien la música electrónica como oyente?

T: No creo que para ser un oyente de música electrónica tengas que ser raver, pero una cosa es disfrutar la música electrónica en tu casa o en otros contextos y otra muy distinta es disfrutar la experiencia completa que significa ir a una fiesta electrónica. Es OTRA COSA. Una buena fiesta electrónica te puede cambiar la vida para bien, es un momento ÉPICO y LIBERADOR.

Soy conocido por fiestear con ganas mientras toco porque cuando estoy tocando no dejo de estar en la fiesta, es más, me siento aún más involucrado en la fiesta y por ende la disfruto más. Creo que un buen Dj tiene como obligación divertirse en las fiestas y no olvidarse nunca que uno antes de ser Dj siempre fue raver, que todos los Djs nacieron en el dancefloor y es allí donde nacen las ganas de ser Dj; a diferencia de los productores, cuyo su hábitat es el estudio de grabación, no el dancefloor. En mi opinión, el Dj que se olvida de disfrutar la fiesta y pierde la empatía con su público es un Dj destinado al olvido.

ON: ¿Qué proyectos tienes para lo que resta del año?

T: Todo el año he estado mentalizándome con que el 2015 es el año de la internacionalización. Al no ser un Dj/productor que cuente con temas propios y no estar en algún sello internacional de peso, esta meta se complica más, pero creo que la ventaja de ser un Dj que se relaciona bien con el público y genera momentos intensos y divertidos corre a mi favor. Creo que la gente siempre va a querer eso, así que espero poder llegar a otros países este año y no parar de viajar llevando el Love a la mayor cantidad de lugares del mundo. También espero producir más tracks con Tony V. y, con el tiempo, por mi cuenta, así como con otros artistas. Pronto habrá novedades ;)

ON: Nombra 3 Djs/productores locales a los que debemos estar atentos y por qué.

T: Two´s Tones: de la nueva generación son los que más me gustan como Djs y como productores. Mantienen una esencia housera old school con funk como me gusta y aparte les sobra la actitud. Y por sobre todas las cosas, están en esto por la razón correcta: por el amor a la música.

Tony V.: no es un productor que se dedique a mezclar en vivo, pero sus producciones son muy variadas y prolíficas. Ha producido con muchos de los productores de peso de este país y creo que su nombre debería ser más conocido en otros lugares.

Danny eM.: es un artista completo. Produce, mezcla y hace live acts de géneros variados. Es profesor de producción y es una persona que respira y vive música las 24 horas del día. Alguien a quien yo admiro bastante y a quien sé que siempre le va a ir bien en cualquiera de sus proyectos.

Y así, nos despedimos del gran Tolinchilove, con la buena onda que lo caracteriza y transmite en cada set, aquí, una breve muestra: