Un fan alemán de Motörhead ha tenido que ser tratado por un coágulo de sangre en el cerebro después de asistir a un concierto de la poderosa y ruidosa banda liderada por Lemmy Kilmister. El hombre en cuestión, de 50 años, desarrolló este problema de salud después de asistir a un concierto de Motörhead con su hijo. A pesar de esto, los médicos de la Hanover Medical School, donde el enfermo fue tratado, aseguran que el headbanging “no es una actividad peligrosa”.

Los médicos han explicado a The Guardian que el coágulo se formó después del concierto de Motörhead (en enero de 2013, pero los estudios se han hecho públicos ahora). El afectado tuvo que recibir asistencia médica por sufrir un constante y punzante dolor de cabeza durante las dos semanas siguientes a la actuación.

Para acabar con este dolor, los doctores tuvieron que perforar su cerebro y drenar la sangre. “El riesgo de heridas por practicar headbanging es muy muy bajo. Pero si el paciente hubiera ido a un concierto de música clásica, esto no habría sucedido”, señalan los doctores.

Este es el cuarto caso documentado de coágulos de sangre por hacer headbanging. “Los bruscos movimientos dieron lugar a la ruptura de algunas venas, causando la hemorragia en el espacio subdural”, sentencian los médicos.

Mira aquí cómo es el headbanging: