Y pensar que comenzaron tocando blues. Covers de Hendrix y de Cream. Tony Iommi, Geezer Butler, Bill Ward y Ozzy Osbourne se conocieron y empezaron a hacer música tradicional americana. Se llamaron primero The Polka Tulk Blues Company y luego Earth. Pero cuando notaron la afición que tenía el cine de terror, cuando la gente esperaba en larga fila para ver Black Sabbath de Mario Bava, todo se hizo claro.

Butler escribió una canción con el mismo nombre de la película, usando temáticas oscuras y se decidió que ese era el nuevo nombre de la banda y que iban a ser la analogía musical a las películas de terror. Así nació Black Sabbath y, según muchos, el heavy metal. Cuando firmaron por la Philips y publicaron su primer álbum epónimo, no tenían conocimiento de que iban a convertirse en una leyenda del rock.

El salto vino con su segundo álbum Paranoid, que entró al top ten en las listas del Reino Unido y Estados Unidos y en 1971, Sabbath ya era una banda de culto, con su temática de horror y sus guitarras discordantes que marcaron el sonido del heavy metal para siempre. En los ochentas y noventas, muchos vocalistas pasaron por la banda, ante la inminente ida de Ozzy. Genios como Ian Gillan, Ronnie James Dio, Glenn Hughes, Ray Gilen y Tony Martin. A pesar de seguir siendo una banda demoledora y comercialmente exitosa, la presencia de Osbourne se extrañaba.

Pero el rey volvió a su reino a finales de los 90s y el Sabbath original volvió a remecer a la fanaticada. El proyecto sigue vivo hoy, aunque sin la presencia de Bill Ward, que decidió dar un paso al costado. Hay fuertes rumores de que vienen al Perú en octubre. Tener a Ozzy decapitando murciélagos con los dientes frente al público peruano es un sueño que podría hacerse realidad. Demos gracias a Satán.