Un anciano de 72 años falleció este lunes víctima de una bala perdida que impactó en su cabeza procedente de un tiroteo en una favela del barrio de Manguinhos, en la zona norte de Río de Janeiro, confirmaron a Efe fuentes de la Policía.

Según la versión policial, el suceso se produjo en la comunidad conocida como Mandela 2, cuando un grupo de delincuentes disparó a una patrulla.

“En esa acción, un anciano fue impactado y no resistió a las lesiones”, detalló la Policía Militar, que ha reforzado la zona.

Este enfrentamiento ha provocado el cierre de dos escuelas de la zona por razones de seguridad, lo que ha dejado a 1.559 alumnos sin clase, según el diario O Globo.

El caso de Evangelista da Silva se produce en medio del escándalo provocado por la muerte de María Eduarda Alves, de 13 años, quien falleció el jueves tras recibir cuatro impactos de bala mientras hacía gimnasia en el patio de su escuela, en el barrio de Pavuna, también en la zona norte.

Las balas que acabaron con la vida de María Eduarda procedían de un enfrentamiento entre policías y presuntos narcotraficantes.

Minutos después, un video difundido por redes sociales mostraba cómo dos policías llegaron a la entrada del colegio, donde se encontraban dos traficantes heridos en el suelo a los que remataron a sangre fría.

María Eduarda fue la tercera menor de 14 años víctima de bala perdida en Río en lo que va de año y la número 20 en los últimos dos años.

El Instituto de Seguridad Pública de Río de Janeiro indica que en enero y febrero de este año hubo 182 homicidios en intervenciones policiales, un aumento de 70 % respecto a 2016.

(Fuente: EFE)

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