El Gobierno español ha trasladado al de Francia su preocupación por varias acciones que han tenido lugar en los últimos días por “grupos incontrolados de viticultores franceses” contra vinos de origen español en almacenes de .

Esos grupos han roto botellas de vino español, lo que el Ejecutivo de Madrid considera un “ataque a la libertad de comercio”, del que también ha dado cuenta a la Comisión Europea, según una nota del Ministerio de Exteriores.

“Estos hechos, que se producen con desafortunada periodicidad, al igual que los ataques que hemos venido sufriendo desde principios de año a camiones transportando vino a granel en las autopistas del sur de Francia, son motivo de preocupación para el Gobierno de España”, añade la nota.

No sólo porque representan “una quiebra del Estado de Derecho” sino también porque suponen “una violación flagrante del mercado único, pilar fundamental de la Unión Europea”.

El Gobierno español también muestra su temor a que esos ataques tengan como consecuencia “una retracción en nuestros clientes franceses habituales, que ven atacados sus establecimientos por vender en ellos productos de origen distinto que el francés”. (EFE)

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