Stanislava Pinchuk mejor conocida como Miso) practica una interesante clase de economía de trueques. Cuando hace sus tatuajes para sus amigos pagan con bienes o favores, no con dinero.

Cambia su arte por “lo que alguien sienta que valga la pena, tal vez me enseñen una habilidad a cambio, me cocinen la cena, me regalen un libro que me encantaría…”, confiesa la tatuadora.

Ella considera que sus tatuajes son algo demasiado importante e íntimo como para tomar el dinero de las personas.

Los diseños son de tipo minimalista, trazos breves que de alguna manera se corresponden con lo mínimo de esos actos cotidianos que se convierten en el precio de su trabajo, aunque con un sentido mucho menos vacío que el que usualmente tienen las transacciones económicas.

Aquí te mostramos algunas de sus obras: