Emily Lettsescribió un artículo para la revista Cosmopolitan en el que asegura estar orgullosa de haber registrado en video el aborto al que se sometió con el fármaco RU-486, que se usa en el primer trimestre de gestación para ocasionar la muerte del embrión.

“Aún cada vez que veo el video, lo amo. Amo cuán positivo es. Pienso que simplemente no hay historias positivas de abortos en video para que todos las vean. Pero la mía lo es”, escribió en la revista.

“Esta es mi historia. Solo mi historia. No pretendo que sea nada más ni nada menos. No hablo en nombre de todo el mundo sobre este tema tan sensible y respeto las opiniones de todos. Tener un aborto no te convierte en una mala persona, una mala mujer, una mala madre. Tener un aborto no te hace culpable. Es simplemente un paso más en tu historia reproductiva. Estoy aquí para ayudarte. Todos estamos aquí para ti”, explica la joven en su vídeo.

Cuando descubrió que estaba embarazada “sabía inmediatamente que iba a tener un aborto”. El propósito de filmar su aborto, reiteró la joven, fue mostrar a las mujeres que “no daba miedo y que hay tal cosa como una positiva historia de aborto”.

“Recuerdo respirar y tararear durante (el aborto) como si estuviera dando a luz. Sé que suena raro, pero para mí, esto fue tan igual como un parto podría ser. Siempre será un recuerdo especial para mí”, señaló.

Paradójicamente, Letts indicó que todavía tienes su sonograma (ecografía), y si su departamento fuera a incendiarse, sería la primera cosa que se llevaría.

El aborto fue realizado en el Cherry Hill Women´s Center en New Jersey, y Letts explicó no sentir culpa: “No me siento como una mala persona. No me siento triste”. “Siento temor sobre qué hacer con un bebé. Yo se que lo que hice es lo correcto para mí y nadie más”.