Anaís Osorio con solo 25 años ya era una conocida modelo en su país. En un video reciente, posteado por el diario Panorama, la joven había contado que para si quiera ser considerada en el Miss Venezuela debía bajar 20 kilos, 44.1 libras.

La chica decía orgullosamente que había superado la meta, adelgazando unas 60 libras en meses “gracias a ejercicio, dieta y mucha disciplina”.

La joven ya había superado otro obstáculo importante. Debido a un problema cardíaco de nacimiento, debió implantarse un marcapasos, que precedería a una operación en el corazón.

Su familia informó que la chica había sufrido un infarto, que a su joven edad fue fulminante. Según la versión de un familiar, Anaís Osío regresó al quirófano, para operarse los senos y realizarse una liposucción. “Había salido bien, pero después se sometió a una dieta estricta que la descompensó tanto que eso ocasionó su partida.”

Muchos aseguran que la dieta y la operación tuvieron algo que ver con su muerte porque afectaron su salud directamente. Ella hizo estos cambios en su cuerpo para “ser más bella” y poder participar en un certamen donde lo físico es lo único que importa.