Detrás del número, hay una gran oportunidad de independizarte, crecer, aprender y cometer muchos, pero muchísimos errores. Pero obvio no todo es malo, al contrario, todavía hay muchas cosas que debes saber.
Errores: Cometerás muchos errores mientras navegas en los mares de la independencia y madurez. Y te va a dar miedo una y otra vez pero es importante que siempre tengas una actitud positiva y sepas reconocer tus equivocaciones; si no fuera por ellas, no aprenderías las lecciones de vida necesarias para seguir adelante y tener mucho éxito en esta etapa.
Independencia: Como mencionamos anteriormente, te vas a aventurar en los mares desconocidos (por lo menos para ti) de la independencia. Y no la dominarás de la noche a la mañana, de hecho es todo un proceso de madurez, comprensión y autosuficiencia que tardarás años en conseguir. Pero no te desanimes, la encontrarás poco a poco y sabrás reconocer el momento en que finalmente estés prácticamente ahí.
Decepciones: A tus 25 crees que el mundo es tuyo y estás a punto de comértelo sin remordimiento pero la cruda verdad es que posiblemente el mundo sea quien termine comiéndote y decepcionándote rápidamente. Las cosas no saldrán como esperabas, tus planes cambiarán y eso terminará decepcionándote después de un par de veces. Pero no tiene que ser deprimente, al contrario, debería motivarte para seguir adelante y empezar a apreciar los cambios que sucederán.
Conexiones: Harás amigos en tu adolescencia pero en esta etapa es hora de enfocarse en algo más importante: los conectes que podrán darte la mano en crisis y apoyo en tu carrera profesional. No es lo más excitante del mundo pero sí esencial para seguir saliendo adelante y abrirte camino en tu carrera.
Amigos: Mientras que hacer conectes es importante para tu vida profesional, no deberías olvidarte de las amistades que conocerás a tus veintitantos. Una vida social es importante para cualquiera pero en esta etapa la necesitarás más porque te ayudarán a crecer, madurar, divertirte y desahogarte. Ya no eres una chica que puede enojarse con sus amigas por cualquier cosa, ahora eres una mujer madura que puede disfrutar y apreciar más el valor de una amistad sincera.
Padres: Tu relación con tus padres cambiará drásticamente en esta etapa. Entre más vayas ganando tu independencia y creciendo como adulto, los irás necesitando cada vez menos y la relación se irá transformando. Se distanciarán pero no tanto como para dejar de pedirles consejos. Además ya no serás una niña ante sus ojos, sino una persona que han visto crecer y puede opinar por su propia cuenta.
Diversion: Sí, es tu momento de crecer, independizarte pero, al mismo tiempo, ¡de divertirte! Y con diversión no nos referimos a emborracharte con tus amigos (porque ahora ya tienes más responsabilidades) sino de tomarte unas vacaciones, viajar, explorar cosas nuevas, cosas que antes no podías por los permisos de tus padres o la falta de dinero. Ahora estás lista para disfrutar de la vida que tú misma te estás construyendo.