En Londres, dos hermanos, Hassan y Hussein Benhaffaf, nacieron unidos por el pecho, hecho por el cual los médicos aseguraron que no compartían ningún órgano vital. En el hospital Great Ormond Street participaron varios doctores y enfermeras en la operación de 14 horas para separar a los siameses.

El médico manifestó que ambos se encuentran en cuidados intensivos y están sedados, pero estables. Los padres de los siameses, Angie y Azzedine Benhaffaf, dijeron en un comunicado el jueves: “Las palabras no pueden expresar el alivio y amor que sentimos por nuestros dos hijos”.

En los países desarrollados, uno de cada 50.000 embarazos, tiene probabilidades de tener siameses.