En algunas ocasiones, muchos padres mantienen cierta preocupación cuando no surgen en el pequeño sus primeros dientes. Lo cierto es que no hay que precuparse, la etapa varía de acuerdo a cada niño.

Algunos bebés a los cuatro meses ya les ha salido el primer diente, otros al llegr al año no tienen ninguno. Que salga más tarde o más temprano no significa una carencia de calcio, pues el niño ya la cantidad necesaria obtenida de la leche materna o de alimentos con contenido en calcio.

A través de una correcta alimentación, el niño no pasará penurias por falta de calcio, en el caso de que a los quince meses no hubiese salido ningún diente, será necesario acudir a un médico para detectar la existencia de algún problema. Es común además que la dentición venga con reacciones a fiebres y resfriados, aunque siempre manteniendo vigilancia de sus respuestas ante otro tipo de trastornos.