Como padres de familiar los guias y aconsejas a diario: les dices que hay que bañarse todos los días, que hay que comer frutas y verduras y que no hay que decir “malas palabras”. Pero hay ciertas lecciones que, de tan obvias, a veces no expresamos.

1 – “No necesitas ser bueno/a en los deportes”.

Déjale claro que no es un requisito para ser “cool” o “popular”. A algunos les gusta el deporte y sienten pasión por el fútbol, esperan con ansias la clase de voley y otros, simplemente no. Es saludable hacer ejercicio y por eso es importante que lo incentives a que mantenga una vida activa y que socialice con sus pares.

2 – “No eres tu trabajo”.

Horas y horas en la oficina, nervios y tensiones ante cada presentación o entrega, satisfacción desmedida ante algo que sale bien… ¿Qué le estás transmitiendo a tus hijos cuando te ven reaccionar y vivir acorde a lo que pasa en tu trabajo? Hazle notar que la vida es mucho más de lo que pasa ahí y que eres mucho más de lo que te dice tu jefe o tus compañeros.

3 – “Nunca dejes de bailar”.

Son conocidos los beneficios de la danza: ya sea de las que se aprenden con disciplina, como la clásica, como de las que se copian en plena pista de baile. Transmítile lo liberador que es moverse al ritmo de la música, con una sonrisa y hasta con los ojos cerrados.

4 – “No seas una persona violenta”.

A nadie le gusta ni se divierte con la violencia. Déjaselo claro. Habla con él o ella de este tema, abre todos los canales de comunicación que consideres necesarios. El bullying, o acoso escolar, es un problema en las escuelas y los papás debemos estar alertas para prevenirlo.

5 – “Nunca dejes de dar besos y abrazos”.

A la mayoría de los niños les encanta acurrucarse, dar besos y grandes abrazos de oso. Dile que nunca pierda eso. Que siempre se guíe por el amor y que las demostraciones de cariño nunca están demás.

6 – “No eres mejor que nadie; y nadie es mejor que tú”.

Géneros, etnias, religiones, orientaciones sexuales, todos somos iguales. Enséñale que las diferencias no existen y que la humildad es uno de los valores más importantes. Además explícale que nunca debe dejar que nadie lo pisotee.

7 – “Sé una buena persona”.

Enséñale el valor de las palabras por favor, perdón y gracias y lo gratificante que es ser amable, cederle el asiento a un anciano en el colectivo o sonreirles a las personas que se cruzan todos los días, como el portero del edificio o la dueña del negocio de al lado.

8 – “Llámame”.

Que tu hijo o hija sepa que siempre vas a estar para acompañarlo/a, en las buenas y en las malas. Que siempre vas a estar de su lado para entenderlo y ayudarlo.