Berrinches en plena vía pública, ataques de ira. Los niños siempre suelen hacer rabietas cuando desean algo o simplemente por llamar la atención. Ni siquiera los padres y madres famosos se salvan de estas “travesuras”.

El caso más reciente lo protagonizó Fiorella Cayo con una infidencia graciosa de su hijo, el pequeño dijo que el ex novio de su mamá era un “borracho”, luego las cámaras del programa “Primera edición” se acercaron a él para arrancarle algunas declaraciones. La respuesta del niño fue: “No se me da la gana (de hablar)”.

En marzo de este año, Jennifer López debió detener su camioneta ante una rabieta de uno de sus hijos. El pequeño Max aprovechó el momento para correr fuera del alcance de su mamá en un intrépido intento de fuga.

En la Navidad del 2011, Katie Holmes llevó a la adorable Suri Cruise a una juguetería en busca del regalo perfecto. Desde que ingresaron al local, la pequeña parecía estar de particular mal humor, por lo que minutos después empezó a arrojar las muñecas y peluches que se le cruzaban en el camino.