Megan Ham tiene una enfermedad neuronal sumamente rara que se conoce como lisencefalía o hipoplasia cerebral, de la cual solo se conocen mil quinientos casos en niños de todo el mundo.

La lisencefalía o hipoplasia es es el nombre que recibe el desarrollo incompleto o detenido de esa arteria cerebral. La arteria cerebral posterior irriga la parte medial de los lóbulos temporal y occipital, estas zonas del cerebro se encargan de la visión y de las funciones motoras, las del movimiento.

Los médicos de la niña aseguraron que difícilmente pasaría de su segundo año de vida. Pero si sobreviviría, entonces nunca podría expresar emociones o reconocer a otras personas. Sin embargo, Megan responde a un impulso del exterior, la música de Justin Bieber. Según su madre, las canciones de Bieber mantienen a Megan feliz y cómoda durante el día.