En la palabra del especialista de la Clínica Oncogyn, Dr. Daniel Ramos Espinoza, “en la mayoría de las pacientes se da esto, debido a que hay una comunicación de la parte lumbar con la parte de la pelvis. El porcentaje de las pacientes en que se da este problema bordea el 70%”.

Ramos Espinoza señaló que no hay una complicación directa para la madre como para el bebé pero que si indirectamente el parto podría suspenderse con los dolores muy fuertes.

El galeno subrayó que una buena manera de prevenir este tipo de problemas es haciendo una buena historia clínica desde el inicio del chequeo prenatal. Si se detectan molestias sospechosas, se debe de hacer las interconsultas pertinentes con los especialistas para llevar un mejor control del embarazo.

Finalmente, el especialista hizo hincapié en que un control prenatal adecuado desde el inicio de la gestación, el cuidado minucioso del peso de la madre durante la gestación y los controles constantes con el especialista, ayudarán a que problemas como este y de otra índole se puedan prevenir y así evitar complicaciones.