En promedio, el tiempo necesario para que una mujer pueda lograr un orgasmo profundo y satisfactorio es de 30 a 45 minutos. Si el hombre “termina” antes de este tiempo, la mujer no puede vivir plenamente el orgasmo.

Eventualmente ella puede vivir el orgasmo clitoridiano, pero es más superficial que el orgasmo vaginal. En cambio, si el acto amoroso dura más tiempo, la mujer puede vivir orgasmos múltiples con un aumento de la energía vital, afectiva y mental.

Durante el acto erótico, la mujer secreta diferentes tipos de líquidos que representan el potencial energético de la mujer y son equivalentes al esperma masculino.

Durante el orgasmo femenino hay contracciones específicas que eliminan estos líquidos y esto representa la pérdida del potencial vital de la mujer. Más allá de que exista un corto período de placer, después el nivel energético general baja considerablemente.