La apariencia física y la personalidad de los padres influye en la elección de la pareja a largo plazo. Así lo explicó a Efe Tamás Bereczkei, director del Departamento de Psicología General y Evolucionista de la Universidad de Pécs, que dirigió las investigaciones.

“Nos propusimos demostrar la teoría de Edipo con métodos científicos. Después de recopilar fotografías, hicimos unos test en los que se tenían que emparejar las caras similares”, indicó el investigador.

Los participantes fueron capaces de cruzar las imágenes y vincular las parejas con los respectivos suegros. La novedad está en que los investigadores utilizaron las técnicas más modernas y con la ayuda de un software especial.

Todo esto parece subrayar la validez del fenómeno conocido como “impronta sexual”, es decir que en la niñez los individuos “graban” los rasgos de sus padres y posteriormente, durante la búsqueda, proyectan este modelo sobre la pareja potencial, “o sea que elegimos también influenciados por las analogías”.

Por otra parte, el investigador adelantó que, aunque todavía no tienen los resultados exactos, “ya podemos afirmar que este modelo no sólo funciona con las similitudes en el aspecto, sino también en lo que se refiere a las características de la personalidad”. EFE