A pesar de tener una familia numerosa, la estrella de televisión, que anunció su separación luego de 72 días de matrimonio con Kris Humphries, ve deshacer sus sueños de convertirse en madre, llevándola a quedarse con el papel de “buena tía” de su sobrino Mason, hijo de su hermana Kourtney, según informa E! Online.

“Siempre quise lo que tuvieron mis padres. Al principio quería tener seis hijos, luego cuatro, para bajar a tres y ahora creo que a lo mejor no tendré ninguno. Quizás solo acepte el rol de tía. En este momento veo muy lejano mi destino de convertirme en madre. Quizás mi cuento de hadas tenga un final diferente al que había soñado, pero bueno, ¿qué le vamos a hacer?” expresó la socialité en una entrevista exclusiva para la revista.

Tras su sonado divorcio, la curvilínea morena confiesa que debe convertirse en una mujer más realista en torno a lo que una espera de los hombres. Todo un idilio que envuelve en el velo de los escándalos amorosos de Hollywood. “Siempre seré una romántica empedernida. Me encanta el sueño de tener una relación perfecta, pero esta idea ha cambiado. Creo que no puedo vivir en este cuento de hadas y ser más realista. Lo que me gustaría no es posible”, comentó a la publicación.