¿Llegar al orgasmo sin sexo? Es un concepto difícil de aceptar cuando se habla de una experiencia íntimamente relacionada al encuentro sexual, ya sea en pareja o individual.
De acuerdo con la sexóloga Barbara Carrellas, sí lo es. Ésta, a través de un estudio por resonancia magnética de la Universidad de Rutgers, mostró por primera vez los cambios que ocurren en el cerebro durante un orgasmo producido, únicamente, por estimulo mental.
El estudio reveló que durante el clímax, se produce un descenso en el flujo sanguíneo del área orbitofrontal del lado izquierdo del cerebro, además hay una activación de la ínsula, una zona relacionada al procesamiento de sensaciones corporales y de empatía; pero, esta ración se puede obtener de otras formas que no sean sexuales.
Aquí algunas de ellas:
Durante el sueño. Para Pedro Villegas, sexólogo, el orgasmo suele estar provocado por contracciones involuntarias de la musculatura peripelviana y generalmente ocurre durante las fases REM del sueño.
Una fricción placentera. El roce continuado de los muslos entre sí y la contracción de la musculatura del suelo pélvico puede ayudarte a llegar al orgasmo.
Mediante hipnosis. De acuerdo con Villegas, el orgasmo en hipnosis es más difícil, puesto que hay que dejar al inconsciente muy liberado para que el hipnotizador acceda a esa zona del cerebro que modula la autocensura.
Comer chocolate. Libera endorfinas, lo que causa una sensación placentera cercana al orgasmo.
Ejercicio. En un estudio realizado por la Universidad de Indiana, en Estados Unidos, descubrió que las mujeres al realizar determinados ejercicios habían llegado al orgasmo sin necesidad de sexo: el 45 por ciento lo siente después de haber hecho abdominales, el 18 por ciento después de hacer spinning, el 9.3 por ciento tras haber trepado por una cuerda, el 7 por ciento después de ejercicios para perder peso.