Una investigación ha demostrado que cada vez que las mujeres rompen en llanto no llegan a resultar del todo sexy, debido a que poseen señales químicas capaces de disminuir los niveles de testosterona en los hombres, relacionado con el deseo sexual.

Para el estudio, los especialistas recolectaron lágrimas frescas de mujeres que vieron películas dramáticas o emotivas. Luego se las llevó a un grupo de hombres para que las olieran, sin decirles lo que era, previo a un análisis con ellos.

En la primera prueba se determinó que aquellos varones que olieron las lágrimas de mujeres tristes, sintieron menos atracción sexual por los rostros femeninos. Mientras que el segundo examen demostró que sus niveles de testosterona, medidos en saliva, disminuyeron en promedio un 13%. Incluso utilizando una técnica de resonancia magnética percibieron que, al oler las lágrimas femeninas, se disminuían las actividades en partes del cerebro relacionadas con el deseo sexual, como el caso del hipotálamo.

Hasta ahora se desconocía la finalidad biológica del llanto, pues solo se conocía su función de protector y limpieza de los ojos, pero con el estudió se demostró aquellas señales químicas transmitidas por las lágrimas, pueden ser empleadas sin saberlo, como una barrera de protección.