Sólo una vez que te das cuenta de que encontrar a alguien mejor es casi imposible, podrás apreciar lo que alguna vez tuviste, pero fuiste demasiado inmaduro para mantener.

Cuando te das cuenta de lo mal que hiciste podrás ser capaz de transformar tu vida y dirigirla en la dirección correcta.

En cierto sentido, necesitas a aquel se te escapó para encontrar al que se quedará a tu lado por siempre:

1. Darse cuenta de que amar y estar enamorado no son lo mismo

Cuando dos personas que parecen ser perfectos el uno para el otro terminan mal, en general es porque uno de los dos siente que ya no está enamorado del otro.

Las relaciones pueden ser extremadamente intensas al principio, incluso más cuando estás saliendo con alguien quien podría potencialmente ser el indicado. A medida que la novedad y la excitación van disminuyendo.

No sentir mariposas en tu estómago cuando ves a tu pareja no significa que ya no estás enamorado. Tristemente, esta sensación es traicionera, ya que puedes perder a alguien en cualquier minuto.

2. Darse cuenta de que encontrar a alguien a quien amar es mucho más fácil que encontrar a alguien que te ame

Puedes enamorarte y desenamorarte semanalmente si es que tu mente está abierta a esto. Obviamente, será un tipo de amor bastante superficial, y definitivamente no durará. Pero a pesar de esto, seguirás sintiendo muchas de las emociones relacionadas con este fenómeno. La parte difícil es encontrar a alguien que te ame a ti también.

Si él o ella está en el lugar correcto en la vida, en el estado mental correcto, quizás él o ella se enamorará de ti. Estas ocasiones suelen perderse más que aprovecharse.

3. Darse cuenta de que eres capaz de tratar terriblemente a otras personas

El amor saca lo mejor y lo peor de las personas. Cuando las cosas en las relaciones van como nos gustan, somos los individuos más amables del mundo.

No hay mejor persona que la que está enamorada y no hay persona más horrible que la que teme perder ese amor. Tienes que aceptar lo horrible que puedes ser para poder evitar ser esa persona.

4. Darse cuenta de que tus emociones pueden jugarte malas pasadas

Lo que la mayoría de las personas no ven hasta que es demasiado tarde es que nuestras emociones no son un buen indicador de la realidad.

Muchas relaciones fallan solo por malinterpretar la realidad, sacar las conclusiones equivocadas y luego dejar que nuestras emociones engañosas nos traicionen.

5. Darse cuenta de que a pesar de que ‘para siempre’ es intimidante, también puede ser reconfortante

El miedo al compromiso es algo real. Cada vez que nos comprometemos, estamos rechazando otras alternativas posibles. Siempre hay costes de oportunidad asociados cuando tomamos una decisión.

La mayoría de las decisiones no nos preocupan demasiado, ya que sentimos que podemos revertirlas si es necesario.

Tomar una decisión que crees que durará el resto de tu vida es muy intimidante. ¿Qué pasa si tomas la decisión equivocada? ¿Qué pasa si te estás perdiendo algo mejor? Estas siempre serán posibilidades, pero no puedes luchar con ellas, porque estas preguntas nunca desaparecerán.

Enfócate en todos los aspectos positivos de tener a alguien especial en tu vida trae. La verdad es que nada nunca es definitivo cuando se trata de relaciones. Desafortunadamente, la mayoría de las personas no se dan cuenta de esto hasta que dejan que esa persona especial se aleje.

6. Extrañar a alguien puede doler indefinidamente

La mayoría de los dolores físicos con temporales. Los dolores emocionales, por otro lado, tienen la capacidad de durar por décadas.

La única forma de comprender cuanto es posible extrañar a alguien es extrañar a esa persona con la que ahora sabes que podrías haber pasado toda tu vida.

Nunca extrañarás a nadie de la forma en la que extrañarás a aquel que se te escapó. Puedo decir esto con certeza, porque si te las arreglas para encontrar a otra persona especial con la cual compartir tu vida, te enfrentarás a la muerte antes de dejarlo ir.

Visto en Elite Daily.