Enredados entre las sabanas él se sumergía con fuerza dentro ella, empujaba con furia su hombría y ella se mantenía en la lucha del amor. Parecía estar a punto de consumarse el momento más sublime y romántico de la noche, en cuestión de segundos alcanzarían un orgasmo juntos.

Fríamente controlados, ellos se habían programado psicológica y físicamente para tener satisfacción máxima en simultáneo. Todos los detalles compaginados, los movimientos en concordancia absoluta en ritmo e intensidad, hasta la respiración de ambos parecía estar ensayada con antelación. La frontera que separaba sus cuerpos se empezaba a disolver convirtiéndolos en un solo cuerpo, una sola piel, un solo ser y un único gran placer compartido.

Llevaban el control de su excitación con palabras, jadeos y movimientos, pero él no soportaba retrasar más el clímax cuando empezó a presionarla para que ella concluya su llegada a la meta comùn. Tanto apurar el tiempo, la dama se sintió presionada de no poder alcanzar a su marido en la galopada, tropezó con el miedo anorgásmico y la gloria del espasmo simultaneo se esfumó rápidamente de la cama matrimonial de Javier y Giovanna.

El orgasmo simultáneo es un mito o una realidad; es una práctica posible o una mera casualidad de la química sexual. ¿Has llegado a compenetrarte tanto con tu pareja que es común orgasmear juntos, al mismo tiempo y de manera exactamente sincronizada? ¿Existe alguna técnica, maña o truco que le otorgue a una pareja el máximo placer compartido?

Alrededor del famoso orgasmo simultáneo hay una serie de mitos que nutren la leyenda de la codiciada satisfacción con exactitud. Las escenas más románticas y sexys del cine son las que nos muestran con naturalidad a las parejas más enamoradas teniendo sexo perfecto y alcanzando el cielo los dos al mismo tiempo.

El cine, la televisión y las telenovelas han contribuido en avivar la leyenda del orgasmo simultáneo como sinónimo de unión, amor y absoluta compenetración. Sin embargo en la vida sexual de las parejas comunes llegar al “orgasmo juntos “no es cosa tan sencilla como aparece en el imaginario popular.

En esta búsqueda del sexo ideal y perfecto como máxima expresión del amor que se profesan los noveles esposos “García Ferreira”, han conocido la decepción de idealizar el amor y/o el sexo , cuestionando así su sexualidad y compatibilidad en todos los aspectos de su relación.

Giovanna y Javier son una pareja bastante conservadora, quizás por eso ambos (de manera individual) dieron por cierto el mito del “orgasmo simultáneo” y todas las implicaciones que trae consigo alcanzarlo satisfactoriamente como parte de la vida sexual de una pareja. Giovanna asocia el hecho de no conseguir el clímax puntual –con Javier- con la idea de que no hay suficiente amor, compatibilidad, entendimiento y definitivamente surge la duda sobre si son o no el uno para el otro. En algunas ocasiones se ha sentido tan presionada por el momento que ha tenido que fingir un orgasmo – totalmente histriónico- para no decepcionar los deseos de Javier, quien se esmera al máximo por complacerla.

La idea errónea de la perfección de una pareja materializada en el clímax al mismo tiempo, es un mito, leyenda o falacia la cual le ha hecho mucho daño a la vida sexual de las parejas formalmente constituidas y en especial a las mujeres, pues somos nosotras las que nos demoramos más tiempo en alcanzar el orgasmo.

La satisfacción simultánea sí existe, el orgasmo sincronizado se logra con mucho conocimiento de sí mismo, absoluta confianza en la pareja y control de los impulsos sexuales. El sexo no es una ciencia, no existe método alguno que garantice la satisfacción absoluta de determinada práctica pues la sexualidad es individual y única en cada ser humano.

Para lograr un orgasmo uno debe estar relajado, cómodo y excitado, para lograr un orgasmo simultáneo se necesita control, paciencia y mucha práctica.

Cuando Giovanna me preguntó si yo había conseguido alguna vez el anhelo máximo de una pareja, dije que sí. Lo he logrado varias veces en el momento más inesperado, sin planificación previa ni predisposición alguna; por el contrario la satisfacción simultánea ha sido fruto de una magnífica confianza, comunicación –hot- oportuna y simplemente dejarse llevar por el momento. El orgasmo comùn vendrá como resultado del momento, creo que son un chiripazo sexual más que la prueba fehaciente de la compenetración absoluta de una pareja.

A pesar de no darle tanta importancia al mito del orgasmo simultáneo compartí con Giovanna y su terrible ansiedad algunos puntos importantes para alcanzar su ansiada meta orgásmica compartida. Debemos partir de alejar el estrés y la auto presión, pues mientras más pienses en el orgasmo, este menos aparecerá. Luego de liberarnos de la presión debemos guiar a nuestro compañero por nuestra ruta rápida y eficaz del placer sin vergüenza ni culpas- por decir en voz alta lo que nos gusta, tener juegos previos y escoger la postura correcta también ayudará en la carrera por el orgasmo.

El más sabio consejo para Giovanna es que disfrute del momento al máximo, que juegue con sus fantasías mientras sensibiliza todos sus sentidos. El orgasmo simultáneo fluirá como producto del sincero disfrute.

Lograr la satisfacción simultánea no es reflejo de una buena vida sexual ni del bienestar de una relación, tampoco es el símbolo del amor eterno ni del alma gemela. Por el contrario forzar una situación tan compleja como el orgasmo puede ocasionar desajustes como eyaculaciones precoces o erecciones prolongadas en los varones y en las mujeres, la temida anorgasmia.

Lo perfecto del sexo es vivirlo, sentirlo y disfrutarlo, no hay nada más placentero que ver a tu compañero (a) retorciéndose del placer al tocar el cielo, mientras esperas tu turno por lograrlo.

Por: Mónica Cabrejos.