Tener las rizadas es algo que todas las mujeres deseamos para que nuestra mirada resalte aún más y los ojos se roben el protagonismo del rostro. Para quienes no nacieron con este toque especial, hay diversas alternativas para lograrlo.

Desde el rizador de metal, pasando por la cucharita de té o el lifting, un procedimiento que trata la pestaña desde la raíz.

Este tratamiento permite alisar, erguir y estirar sutilmente los pelos que hay en los bordes de los párpados, creando un efecto visible de proyección y longitud.

Tras el lifting, las naturales parecerán visiblemente más densas y sin la aplicación de extensiones. El efecto dura, según la calidad de pestañas naturales, de 5 a 8 semanas y se puede repetir en cualquier momento. Pero, ¿por qué someterlas a un proceso con especialistas si podemos lograrlo en nuestra casa?

En la actualidad, las máscaras de pestañas ya cuentan con el efecto lift. Para darle volumen, definición y un acabado profesional, el aplicador es nuestro mejor aliado.

Lo que necesitas es uno que tenga micro cerdas y forma espiral. La parte convexa del cepillo proporciona definición y separación.

La máscara Extremific incorpora la tecnología Micronic Convex a su aplicador. Posee una fórmula leve y cremosa, con materias primas de alta performance, que brindan un color negro intenso y alta cobertura. Es a prueba de agua, resistente al sudor y las lágrimas. Además, el producto ofrece una duración de 12 horas, es fácil de remover, no deja manchas ni produce la caída de pestañas, según explicó Fiorella Solari, Gerente de Marketing Producto de Natura Perú.