La retirada del diseñador italiano Valentino Gravani de los focos de la moda no ha impedido al genio de 81 años dedicar parte de su tiempo a crear algunos encargos muy especiales.

Uno de ellos: el espectacular vestido de novia de Magdalena de Suecia, una de las princesas europeas más bellas, que pasaba por el altar este mismo fin de semana junto a su ahora marido, el financiero norteamericano Chris O’Neill.

Una creación sorprendente en términos bridal por el diseño de la manga y el escote: además de una cara preciosa, la joven princesa luce unos hombros y brazos envidiables.

Un diseñador con ojo y larga experiencia con la aguja como Valentino no habría dejado pasar uno de los puntos fuertes de la anatomía de la novia, esbozando un patrón que gira exclusivamente en torno a los hombros y rostro.

El look con manguita de este tipo promete convertirse así en una de las tendencias de las pasarelas nupciales del año que viene, y, previsiblemente, de las colecciones de 2015; un efecto muy parecido del que sucedió a otra de las Bodas Reales más sonadas de los últimos años: el espectacular Alexander McQueen de Sarah Burton para Catherine Middleton creaba escuela allá por 2011.

Con infinidad de firmas replicando aquellas inolvidables mangas de encaje, largas hasta la muñeca, con las que la Duquesa de Cambridge hacía frente a las intempestivas temperaturas de Londres de finales del mes de abril.