Cada persona tiene un tipo de y conocer cuál es la tuya te ayudará a cuidarla adecuadamente, y también poder elegir los productos ideales al maquillarte. Y es que, por ejemplo, si tienes un cutis graso debes evitar aquellos que contengan aceite o tu rostro se verá con mucho brillo.

Hay seca, mixta, grasa, normal, y sensible, y cada una de ellas tiene particularidades diferentes. Para ayudarte a saber cuál es la tuya, las especialistas de Aruma te comparten sus características.

Piel Normal

La circulación sanguínea es la ideal, sus poros son mínimos así que el acné no es un problema.

Piel Seca

No puede retener la humedad que su cutis necesita y es ápera. Es muy sensible a los rayos solares y al viento.

Piel Grasa

Genera más sebo de lo que debería, provocando que la cara se vea con mucho brillo y la persona tenga problemas de acné. En estos casos, se aconseja lavar el rostro de 2 a 3 veces al día con jabones de glicerina.

Piel Mixta

Es una mezcla entre grasa, seca y normal. Suele presentar exceso de brillo en la zona T (frente, nariz y barbilla) y las mejillas tiene una superficie normal.

Piel sensible

En estos casos el estrés, clima seco y los rayos UV pueden ocasionar que la piel sufra de enrojecimiento. Para protegerla puedes usar cremas especiales y productos sin perfumes.